Ayer sabado, quedamos para ir al café bretón, un bar sencillito, de los de antes, sin grandes decoraciones ni nada, a tomarnos unos litros antes de salir por ahí.
El de calimocho estaba caro (8 e), el de cerveza más en la media (4 e), y después con las cervecillas y la fiesta nos bajamos al casco.
Me llevaron a un tal osiris, que se está bien, buena musiquilla y sin agobios. La edad de las chicas me superaba, especialmente las de al lado, que tras una presentación y charla inicial super maja enseguida se interesaron por mi edad.
Sus 28 años, y ser maestra de educación infantil, le engendraron unos absurdos preconceptos de no ligar con un chaval de 19 y enseguida se le corto el rollo.
No sé si es por mi carácter o qué, pero yo hablo con todo el mundo tenga 15 o 76 años, si lo que me dice me resulta interesante...
El caso es que no entiendo estas tonterías de si tu tienes, yo tengo... ayyyyyyyyyyyyyy, maestra, maestra.
Como a mi me encanta bailar (estoy aprendiendo) pero siempre me ha gustado,y me voy con mi amigo anibal (que es un crack) a bailar al tropico, un bar por doctor cerrada.
Por eso en cuanto me ponen música del estilo enseguida me pongo contento :) Así que me lo pase bien echando unos bailes.
Luego también me gustaría destacar, que nos estamos acostumbrando a que bailar es sinonimo de ligar o pillar cacho con opciones. Y esto no me gusta, porque que yo quiera bailar y divertirme no significa que con la persona que esté bailando me guste o algo así.
Por eso me gusta el tropico, porque puedes bailar con quieras, sin que se piensen cosas raras, hay gente de todas las edades, la gente te invita y la invitas a bailar, está chulo. Aunque lo dificil es aprender.
Después de salir del osiris, nos fuimos a un par de bares más pero estaban hasta los huevos, y ya nos cansamos. Y acabamos comprandole un gorro a un senegales y deseándole suerte, jeje...
Antes de llegar a casa a las tantas de la madrugada, hicimos una parada en el casino zaragoza, tras la insistencia de mi amigo Pablo. Y sucumbí a sus rogativas.
Yo virgencito en el casino, la idea de casino que tenía era la de las películas, gente dandole a las tragaperras, mesas con mucho dinero en juego, y gente bien vestida y esas cosas.
Pues los anteriores conceptos digo yo, que variará en función del status del casino. Porque allí me pareció, que había bastante gente normal perdiendo el dinero.
Tras unas breves explicaciones de la ruleta, llegue a una conclusión, si aprecias el esfuerzo que te ha costado ganarte el dinero no te lo jueges como un idiota a la odiosa fortuna.
Si estás forrado y no te importa, donar un poco al casino y otro poco a las arcas públicas, pues adelante (es tu dinero no es el mío).
En definitiva, me parece un sábado excursionista y descubridor.
El de calimocho estaba caro (8 e), el de cerveza más en la media (4 e), y después con las cervecillas y la fiesta nos bajamos al casco.
Me llevaron a un tal osiris, que se está bien, buena musiquilla y sin agobios. La edad de las chicas me superaba, especialmente las de al lado, que tras una presentación y charla inicial super maja enseguida se interesaron por mi edad.
Sus 28 años, y ser maestra de educación infantil, le engendraron unos absurdos preconceptos de no ligar con un chaval de 19 y enseguida se le corto el rollo.
No sé si es por mi carácter o qué, pero yo hablo con todo el mundo tenga 15 o 76 años, si lo que me dice me resulta interesante...
El caso es que no entiendo estas tonterías de si tu tienes, yo tengo... ayyyyyyyyyyyyyy, maestra, maestra.
Como a mi me encanta bailar (estoy aprendiendo) pero siempre me ha gustado,y me voy con mi amigo anibal (que es un crack) a bailar al tropico, un bar por doctor cerrada.
Por eso en cuanto me ponen música del estilo enseguida me pongo contento :) Así que me lo pase bien echando unos bailes.
Luego también me gustaría destacar, que nos estamos acostumbrando a que bailar es sinonimo de ligar o pillar cacho con opciones. Y esto no me gusta, porque que yo quiera bailar y divertirme no significa que con la persona que esté bailando me guste o algo así.
Por eso me gusta el tropico, porque puedes bailar con quieras, sin que se piensen cosas raras, hay gente de todas las edades, la gente te invita y la invitas a bailar, está chulo. Aunque lo dificil es aprender.
Después de salir del osiris, nos fuimos a un par de bares más pero estaban hasta los huevos, y ya nos cansamos. Y acabamos comprandole un gorro a un senegales y deseándole suerte, jeje...
Antes de llegar a casa a las tantas de la madrugada, hicimos una parada en el casino zaragoza, tras la insistencia de mi amigo Pablo. Y sucumbí a sus rogativas.
Yo virgencito en el casino, la idea de casino que tenía era la de las películas, gente dandole a las tragaperras, mesas con mucho dinero en juego, y gente bien vestida y esas cosas.
Pues los anteriores conceptos digo yo, que variará en función del status del casino. Porque allí me pareció, que había bastante gente normal perdiendo el dinero.
Tras unas breves explicaciones de la ruleta, llegue a una conclusión, si aprecias el esfuerzo que te ha costado ganarte el dinero no te lo jueges como un idiota a la odiosa fortuna.
Si estás forrado y no te importa, donar un poco al casino y otro poco a las arcas públicas, pues adelante (es tu dinero no es el mío).
En definitiva, me parece un sábado excursionista y descubridor.
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